El estado nutricional es la situación en la que se encuentra una persona en relación con la ingesta y adaptaciones fisiológicas que tienen lugar tras el ingreso de nutrientes. La evaluación del estado nutricional será por tanto, la acción y efecto de estimar, apreciar y calcular la condición en la que se halle un individuo según las modificaciones nutricionales que se hayan podido afectar. La evaluación nutricional mide indicadores de la ingesta y de la salud de un individuo o grupo de individuos, relacionados con la nutrición. El procedimiento a seguir incluye:
- Historia clínica.
- Exploración física y medidas antropométricas.
- Datos de laboratorio.
- Otras exploraciones.
LA HISTORIA CLINICA
Se recogen los datos sobre patologías presentes en el individuo (problemas endocrinos, respiratorios, digestivos…), así como los fármacos con los que se está tratando.
También es imprescindible realizar una historia dietética, mediante una encuesta dietética de los últimos 3 días, así como las preferencias, frecuencia de consumo de alimentos, rechazo de determinados alimentos y su causa, y evaluación de los objetivos a conseguir.
LA EXPLORACIÓN FÍSICA Y MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS
La evaluación antropométrica es el conjunto de mediciones corporales con el que se determinan los diferentes niveles y grados de nutrición de un individuo mediante parámetros antropométricos e índices derivados de la relación entre los mismos En la evaluación antropométrica analizamos:
- Peso y talla.
- Índice de Masa Corporal (IMC) Es el índice que mejor se correlaciona con la proporción de grasa del individuo adulto, y es frecuentemente utilizado para la clasificación de sujetos obesos y con sobrepeso.
El IMC se obtiene de se obtiene de la relación Peso/Talla2 (Kg. /m2). Ver calculadora de índice de masa corporal IMC.
- Índice cintura/cadera. Es un parámetro indicativo de la distribución de grasa corporal. El índice se obtiene midiendo el perímetro de la cintura a la altura de la última costilla flotante, y el perímetro máximo de la cadera a nivel de los glúteos.
Se ha visto que una relación entre cintura y cadera superior a 1.0 en varones y a 0.8 en mujeres está asociado a un aumento en la probabilidad de contraer diversas enfermedades (diabetes, enfermedades coronarias, tensión arterial…)
La interpretación de este índice es:
- ICC = 0,71-0,85 normal para mujeres.
- ICC = 0,78-0,94 normal para hombres.
- Valores mayores: Síndrome androide (cuerpo de manzana).
- Valores menores: Síndrome ginoide (cuerpo de pera).
 - Circunferencia de la cintura: La determinación aislada del perímetro de la cintura es también un parámetro indicativo de la distribución de la grasa corporal. Los valores de referencia varían según la raza y población. En la raza europea se considera factor de riesgo cuando es mayor de 82 cm. en mujeres y más de 95 cm. en varones, siendo un riesgo muy elevado en mujeres y varones cuando es mayor de 90 cm. en mujeres y 102 cm. en varones.
DATOS DE LABORATORIO
Niveles de colesterol en sangre: Realizamos la medición del colesterol en sangre mediante tiras reactivas. Los valores de colesterol obtenidos son imprescindibles para la realización de una dieta personalizada.
OTRAS EXPLORACIONES
Nuestra Área de Nutrición cuenta con una moderna tecnología, que sirve de apoyo para la realización de los tratamientos personalizados. Es el caso del Analizador de composición corporal Tanita, que mediante bioimpedancia, diagnostica con alta precisión el porcentaje de agua, materia magra y materia grasa corporal.
Los valores óptimos de agua corporal son en mujeres del 45 al 60%, y en varones del 50 al 65%. Hay que tener en cuenta que el porcentaje de agua corporal total tenderá a disminuir a medida que el porcentaje de grasa corporal aumente.
 El porcentaje de agua corporal total tenderá a disminuir a medida que el porcentaje de grasa corporal aumente, por lo que a medida que disminuya el porcentaje de grasa corporal, el porcentaje de agua corporal total deberá acercarse gradualmente a los niveles típicos indicados anteriormente.
Una vez finalizada la valoración del estado nutricional, y con los datos obtenidos, se realiza una dieta personalizada, teniendo en cuenta las necesidades y requerimientos de cada persona.
Quincenalmente el paciente asistirá a la consulta de nutrición, para llevar a cabo su seguimiento, donde se vuelve a realizar la valoración del estado nutricional, y se modificará la dieta en los casos que sea necesario, para finalmente llegar a la última fase de la dieta, el mantenimiento del peso alcanzado. 
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